
En una de las visitas que suele hacernos Alejandro (cervecería Vincer) por las noches, después de cerrar, y quedándose a compartir la cena con nosotros, ya mas distendidos después de un largo día de verano, nos comentó que teníamos que ir a probar unas cervezas artesanales belgas que habían traído nuevas. Sin mucha demora nos dejamos caer por allí para amenizar el día de descanso y además degustar entre otras, la tan comentada novedad; entre la variedad encontramos algo que nos llamó la atención: la Steenuilke, una larger rubia turbia con unos aromas realmente sorprendentes, buen cuerpo, con una buena presencia de lúpulo y con un 6,5% de graduación alcohólica. Lo que hace tan interesante a esta cerveza es su fermentación alta, conocida así por darse en la parte superior externa del tanque de fermentado; tras esto, se da una segunda fermentación, mas lenta, que dura de unos 15 a 20 días y se realiza ya en botella.
Además de lo delicioso de esta cerveza, hay un trasfondo ecológico serio: ayuda a la conservación y protección del búho del que toma su nombre e imagen, el mochuelo europeo o común, también conocido en los Países Bajos como Steenuil, y en latín como ''Athene Noctua'', nomenclatura que se le atribuye gracias a que era el animal simbólico de la diosa griega Atenea, representante de la razón y la inteligencia y patrona de la ciudad de Atenas; de hecho, su importancia ha llevado al animal a aparecer en algunas monedas griegas.

Los creadores de este brebaje le añaden varias especias, como son la aspérula olorosa, la angélica y el endrino, que normalmente se encuentran en los alrededores del hábitat natural del ave rapaz.
Como no podía ser menos, y tras tan grato descubrimiento, unos pocos días después de haber probado esta cerveza, ya la teníamos disponible en
Vor Bier&Bar. La maridamos con el Tataky de atún rojo del Mediterráneo con mayonesa de wasabi, que tenemos habitualmente fuera de carta en El Cencerro y que quedó finalista del certamen de pinchos de Asturias 2010, que nos hacía pedir otro trago para volver a disfrutar de la combinación de todos los sabores que, sinceramente, hacen una pareja perfecta.
También vosotros, en la Argentina, tenéis una especie de Athena: mira, mira...
ResponderEliminarEn cuanto a la sugerente combinación de comida y bebida que proponéis, una vez más ¡habrá que probarla!
Un cordial saludo a Alejandro, a quien hace un tiempo que no veo.
Si sabia que tenias una foto asi te la pedia para publicarla en el blog,los saludos para Alejandro de tu parte.
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